La mediación es un recurso para la gestión y resolución de conflictos, ágil y flexible, donde dos o más personas participan voluntariamente en un proceso privado y confidencial.
Este procedimiento confidencial, con profusión de estrategias y técnicas, permite que las partes implicadas en un conflicto, con la participación y ayuda de un/a profesional neutral, imparcial e independiente (mediador/a), formulen, identifiquen y analicen las cuestiones en disputa, con el objetivo de mejorar las relaciones entre las partes, así como desarrollar y plantear -ellas mismas- opciones o alternativas que les permitan, desde la comprensión mutua, llegar a acuerdos que solucionen el conflicto.
Es decir, el mediador no tiene potestad para toma decisiones ni imponer la solución al conflicto, sino que su función es facilitar que las partes implicadas lleguen a un acuerdo. Pero el acuerdo, a pesar de ser importante en sí mismo, no es la única finalidad, pues, lo realmente importante y beneficioso es que las partes adquieran la capacidad de gestionar por sí mismos los conflictos y así transformar y mejorar las relaciones futuras que contribuyan al bienestar personal y a la paz social.
Las actuaciones en los distintos ámbitos son llevadas a cabo por profesionales especialistas en la materia.
- Mediación Familiar *
- en procesos de separación y divorcio
- en conflictos de herencia
- en familias reconstituidas
- en familias monoparentales
- en conflictos intergeneracionales
- Mediación Intrauniversitaria
- Mediación Educativa
- Mediación Socio-laboral (Interna ULPGC)
- Mediación en conflictos interpersonales
- Mediación Intercultural
- Mediación Penal
- Mediación Civil
- Mediación Escolar